El compatriota fue abordado en una barrera de control de la Policía Rodoviaria Federal en el municipio de Cascavel. Los agentes no informaron qué los condujo catear al pasajero quien llevaba varias piedras, hasta el momento misteriosas, dentro de su zapato. Solo refirieron que se trató de un procedimiento de rutina.
De acuerdo al informe proporcionado por los agentes federales el ciudadano paraguayo transportaba 31 piedras aparentemente preciosas, cuyo tipo específico se espera confirmar luego del respectivo análisis.
El material estaba en un compartimiento oculto dentro de su zapato. La aprehensión se produjo en la noche del lunes. El mismo pretendía viajar hasta el estado de Bahía, donde debía entregar las piedras.
El detenido alegó que las piedras fueron extraídas de una zona minera de suelo paraguayo y no supo precisar si era algún tipo de piedra preciosa, semi preciosa o algún tipo de roca por lo que todo fue incautado y remitido al laboratorio de la Policía Federal de Cascavel para su análisis y valoración.
El connacional, cuyos demás datos no fueron revelados, también tenía una orden de captura por coacción sexual en Paraguay y le fue negada la permanencia en el país vecino por lo que debe ser expulsado en las próximas horas.
Los personales del Comando Tripartito, lado paraguayo, esperan la confirmación de su entrega para ser puesto a cargo del juzgado que decretó su detención.
