Javier Rotela fue extraído del penal de Tacumbú a fin de debilitar su esquema criminal y fue derivado a la cárcel “de máxima seguridad” de Emboscada pero ahora esta penitenciaría está prácticamente bajo su poder.
Imágenes del Penal de Emboscada, que datan de hace dos meses, muestran cómo prácticamente sin ser molestados sabotearon cámaras, se pasaron entre sí objetos e incluso destruyeron parte de la estructura del pasillo.
El ministro de Justicia, Rodrigo Nicora, negó que le Estado perdió el control de la Penitenciaría y que tras esta polémica se destituyó a * funcionarios.
“El control nunca fue perdido, lo que sí se detectó es que funcionarios no aplicaron protocolos de prevención previos”, dijo el ministro.
