La gran movilización nacional de enfermeros, denominada la “Marea Blanca”, congregó a una multitud de profesionales frente al Ministerio de Salud, desafiando el intenso frío. Delegaciones provenientes de diversos puntos del país, incluyendo Canindeyú, San Pedro, Villarrica, Pilar, Encarnación, Concepción, Alto Paraná y Misiones, se unieron a esta protesta que busca visibilizar una deuda histórica con el personal de enfermería.
Entre las principales demandas presentadas por los manifestantes, liderados por la Asociación Paraguaya de Enfermería, se destaca la urgente necesidad de fortalecimiento de los servicios de salud en las cabeceras departamentales, con dotación de insumos y medicamentos, y la reparación de unidades de terapia intensiva neonatal, aún pendientes en el Hospital Nacional. Un punto crucial es la situación salarial, ya que más de 5.000 enfermeras del Instituto de Previsión Social (IPS) perciben salarios por debajo del mínimo establecido para la profesión, Gs. 3.000.000. Además, reclaman el pago del 30% por turno nocturno y por días feriados, montos que, según ellos, nunca han percibido.
La protesta también enfatiza la oposición a la tercerización de los servicios de salud y la defensa de un sistema de salud público, gratuito y universal. Los enfermeros exigen la liberación de rubros para la “desprecarización” del personal y garantizar el presupuesto 2026 para la carrera profesional de enfermería. También solicitan la disminución de la carga horaria, una lucha que lleva meses, y la creación de más cargos, especialmente en el interior del país.
Tras entregar una carta a la Ministra de Salud, la marcha continuará hacia el Instituto de Previsión Social y finalizará frente al Ministerio de Economía, buscando respuestas y acciones concretas a sus reivindicaciones.
