El vehículo presentaba modificaciones, incluyendo la eliminación de insignias y protectores de lluvia. Además tenía una chapa apócrifa tan bien confeccionada que podría burlar fácilmente cualquier control, según las autoridades. La pareja ofrecía el coche, cuyo valor de mercado ronda los 30 a 35 millones de guaraníes, a un precio inicial de 10 millones de guaraníes.
La recuperación del automóvil se logró tras un trabajo de inteligencia e investigación. El vehículo, un Toyota Corolla, había sido sustraído en marzo en la zona de Mariano Roque Alonso. Para intentar evadir la detección, los criminales le habían quitado las insignias, así como los protectores de lluvia de los costados de las puertas, y modificaron las llantas y tazas. Según el informe, el vehículo ya había sido ofrecido primeramente a un reducidor por 10 millones de guaraníes. Posteriormente, el plan era volver a ponerlo a la venta, pero a un precio normal de mercado, posiblemente utilizando documentación falsa. Las autoridades lograron impedir que el vehículo fuera nuevamente comercializado.
El detalle más impactante del caso fue la chapa apócrifa o clonada que utilizaba el rodado. El trabajo minucioso de los técnicos especialistas confirmó que, si bien la placa a simple vista no parecía falsa, correspondía a los números de otro vehículo legal de la misma marca y modelo, una técnica utilizada para despistar los controles. El comisario Juan Pereira señaló que la chapa fue confeccionada de manera tan hábil que “fácilmente puede burlar cualquier control en cualquier lugar”.
Las dos personas detenidas estarían ligadas a un grupo de “Robacoches”, liderado por un sujeto conocido por el alias “el abuelo”. Varios integrantes de esta banda ya fueron detenidos previamente, y las autoridades presumen que este grupo ha robado más vehículos.
La investigación sobre la clonación de las chapas continúa, buscando los lugares donde se fabrican estas placas, ya que en allanamientos anteriores realizados en el Área Central e Itapúa, se incautaron máquinas y elementos utilizados para la fabricación de chapas apócrifas.
Por último, el Departamento de Control de Automotores insta a los ciudadanos a consultar con especialistas al adquirir un vehículo para evitar caer en estafas con documentación adulterada.
