Una jornada que debía ser de fútbol terminó empañada por la violencia. Este domingo, durante el encuentro entre el equipo local y el club Galicia por los Cuartos de Final de la Liga Ovetense de Fútbol, un grupo de personas lanzó bombas de pirotecnia desde el sector del público directamente al campo de juego.
Las explosiones sorprendieron a jugadores de ambos equipos, dejando a varios aturdidos y tendidos en el césped. La situación derivó rápidamente en caos: la Policía intervino para identificar y reducir a los responsables, pero un grupo de hinchas reaccionó con agresiones hacia los uniformados.
Como consecuencia del enfrentamiento, al menos un agente policial resultó con heridas de gravedad. También se reportaron lesionados entre el público y los jugadores, aunque sin riesgo de vida.
Las autoridades investigan el hecho y no se descartan sanciones para el club anfitrión.