Según testigos, Fernández se levantó abruptamente de su banca y se dirigió directamente al sector donde se encontraban diputados opositores al Gobierno, en un intento de amedrentarlos mientras estos cuestionaban al contralor general de la República, Camilo Benítez. Los parlamentarios expresaban su rechazo al supuesto uso de la Contraloría como “arma política” para impulsar la intervención de la Municipalidad de Ciudad del Este.
El momento de mayor tensión se produjo cuando Jatar Fernández se enfrentó verbalmente con su colega Guillermo Rodríguez. Ambos estuvieron a punto de llegar a los golpes, situación que fue contenida gracias a la intervención oportuna de otros legisladores presentes.
Tras el incidente, varios diputados pidieron una sanción ejemplar contra Fernández. Johanna Ortega manifestó que el legislador “no tolera nuestras expresiones y va hacia nuestro sector a amedrentarnos”, agregando que “sus compañeros de bancada son los primeros que deberían considerar su suspensión”. En tanto, Hugo Meza calificó lo ocurrido como “un triste espectáculo” y afirmó que “hay que tocar el bolsillo” del legislador para que entienda la gravedad de su accionar.
El presidente de la Cámara Baja, Raúl Latorre, anunció que se iniciará una evaluación formal del caso una vez que se recabe toda la información correspondiente, y no descartó posibles sanciones.
