Adolfo Mendoza es un albañil de 45 años que intentó renovar su cédula para viajar y se topó con la sorpresa de que en su contra pesaba una orden de captura por lesión de confianza y rebeldía por una obra que costó G. 120 millones a la Municipalidad de Valenzuela.
«Mi idea era presentar mi documento para viajar. Mi cédula estaba algo rota. Le pregunté a un amigo policía de la 3ª de Luque a quien le hacía un trabajo de albañil sobre cómo puedo renovar. Él se ofreció a tramitar. Fui a su casa para cobrar, me pidió mi número de cédula para hacer los trámites. Entró en el sistema porque tengo orden de captura. Como no tengo problemas, él me comentó esta situación y me detuvo», contó a Monumental 1080 AM.
Señaló Mendoza que, luego de haber contratado un abogado, cayó en la cuenta de que a su nombre se sacaron préstamos de G. 90 millones y G. 30 millones, totalizando G. 120 millones y que no tiene idea de cómo ocurrió semejante hecho y que figura como propietario de una constructora.
«Según mi abogado, tengo una orden de captura con una remisión directa. 45 años tengo y ningún caramelo robé a mi semejante», aseguró.
Mendoza manifestó que no puede pagar por algo que no cometió y que los sujetos que están detrás del hecho s encuentran libres y sin ser investigados.
«Esto llega a causa de obras fantasmas en Valenzuela. Me atribuyen a mí como un prestador de servicio y nunca hice un trabajo para ese municipio. Aparezco como propietario de una empresa de construcción lo cual es falso», dijo.
🔴 Atención con esta grave denuncia
— Monumental AM 1080 (@AM_1080) September 15, 2023
🔸 Adolfo es un albañil de 45 años que tiene una orden de captura por una obra fantasma que valió G. 120 millones al municipio de Valenzuela.
🗣️ "Yo tengo pagar por algo que nunca cometí mientras los que me metieron en esto están libres. No… pic.twitter.com/xTH29m1NZ3