Una vez más, la Cámara de Diputados fue escenario de un lamentable espectáculo. La sesión de este martes estuvo marcada por fuertes discusiones, gritos e incluso amenazas de agresión física entre legisladores, dejando en evidencia el creciente clima de intolerancia dentro del Congreso Nacional.
El cartista Jatar Fernández protagonizó un tenso momento cuando se levantó de su banca, se dirigió al curul de su colega Raúl Benítez y lo amenazó con golpearlo. El incidente ocurrió luego de que Benítez hiciera referencia a la diputada Lizarella Valiente, generando una airada reacción de Fernández.
“Yo empecé a hablar de lo de Lizarella. El colega (Jatar) se fue a gritar detrás de mí. Yo pedí orden al presidente de la Cámara y él (Jatar) quiso reaccionar de forma violenta”, relató Benítez tras el altercado.
En medio de la tensión, también intervino el diputado Yamil Esgaib, quien se levantó de su asiento, lo señaló con el dedo y vociferó en contra de Benítez, sumándose al clima de confrontación.
“Ese es su papel dentro de la Cámara. Quiso llegar a los golpes. Acá hay gente que hace el papel de barras y patoteros porque no soporta voces disidentes”, añadió Benítez.
La diputada opositora Johanna Ortega también se pronunció sobre lo ocurrido, cuestionando la actitud del legislador cartista:
“Jatar no entiende que él no está en la cancha, que ya no es barra y que está en la Cámara de Diputados”.
Este nuevo episodio suma un capítulo más al historial de sesiones caóticas que empañan el trabajo legislativo y deterioran la imagen del Parlamento ante la ciudadanía.