A pesar de que las clases comenzaron hace tres días, las aulas están en pleno proceso de reparación y, debido a ello, las clases se están llevando a cabo de forma virtual.
Una madre de familia expresó su preocupación por las condiciones en las que se encuentran los pupitres y los baños del colegio, los cuales están en un estado de abandono. Además, denunció que las Áreas de Coordinación Educativa (ACEs) no están rindiendo cuentas sobre las múltiples actividades que se han anunciado para mejorar la infraestructura de la institución, lo que ha generado malestar entre la comunidad escolar.
A pesar de que hace días comenzaron las clases, las refacciones no han avanzado de manera significativa, y los trabajos no se han concretado.
El director del colegio, por su parte, trató de restarle gravedad a la situación, afirmando que “estamos muy felices por los arreglos que están llegando a través de la Municipalidad”. Sin embargo, los problemas persisten, y la falta de avance en las reparaciones sigue afectando el desarrollo de las clases presenciales, dejando a los estudiantes con clases virtuales como única alternativa.
Mientras tanto, la comunidad educativa sigue esperando una solución definitiva a los problemas de infraestructura que afectan al emblemático colegio.