Desde hace 23 años el comedor para indigentes de las hermanas guanelianas recibe a niños y adultos. Durante esta festividad mariana se suman los indígenas.
Buscando ganar algo de dinero y aprovechando estas fechas, 150 nativos se instalaron en la capital espiritual y durante el mediodía se acercan al comedor para recibir almuerzo.
Durante todo el año, el comedor se encuentra abierto de 11:00 a 12:30 de martes a viernes, recibiendo a 30 a 40 personas aproximadamente. Algunos venían desde antes, cuando eran niños, hoy siguen llegando con sus hijos, comenta la hermana Graciela.
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“Nos mantenemos gracias a la providencia de Dios”, aclaró la religiosa. Cuando el comedor inició recibía donaciones desde Italia. Actualmente un supermercado y una casa comercial colaboran con algunos productos.
El menú generalmente es arroz blanco con huevo, guisos, pollo desmenuzado y a veces tallarín. Este comedor está ubicado a tres cuadras de la Basílica de Caacupé.
Las hermanas no están ajenas a recibir colaboraciones de personas solidarias. Quienes quieran colaborar pueden comunicarse al (0982) 233 – 322.
