Los allanamientos y detenciones se realizan desde horas de la madrugada por parte de los agentes federales en cumplimiento a órdenes decretadas por un juez federal que a aparte de disponer las detenciones establece bloqueos de bienes e incautaciones.
Gran parte de los trabajos se concentran en el estado de Paraná, en la frontera con nuestro país en Alto Paraná donde se cumplieron las primeras 3 detenciones de personas que operaban como fleteros para transportar grandes cantidades de las mercaderías adquiridas en los comercios de Ciudad del Este y que eran transportadas en fondos falsos de vehículos que normalmente transitaban en convoit, de acuerdo a un informe proporcionado por la Policía Federal.
Desde la institución también revelaron que el esquema criminal iniciaba con la negociación directa para la adquisición de las mercaderías, entre el comprador localizado en el Brasil y el vendedor del comercio ubicado en Ciudad del Este. Luego de concretarse el negocio las mercaderías eran enviadas de forma clandestina al Brasil, mediante los fleteros, que eran personas particulares y camioneros.
Los pagos por el transporte eran incluidos en el pago de las mercaderías que se hacían a las cuentas bancarias de los comercios ubicados en territorio paraguayo. Una vez confirmada la transacción los productos de electrónica eran enviados y entregados al comprador, ya en territorio brasileño.
Según los cálculos el grupo llego a ingresar a territorio brasileño mercaderías por unos 250 millones de reales en los últimos tres años. La evasión impositiva alcanza los 130 millones de reales para el fisco brasileño.
Grade A pretende cumplir con 70 órdenes de detención preventiva y 94 mandatos de búsqueda y aprehensión. La Justicia Federal también dispuso el bloqueo de las cuentas bancarias y secuestro de bienes de sospechosos que fueron incluidos en la investigación.
Los procedimientos se realizan en domicilios residenciales y comerciales en los estados de Paraná, Mato Grosso do Sul, Minas Gerais, Paraíba, Piaui y Rio Grande do Sul.
Un total de 400 agentes federales fueron movilizados para realizar el operativo Grade A, que traducido al español significa Reja A.