Francisco Cabrera, director general de la empresa de seguridad denominada Alarmas y Monitoreos S.A., denunció este viernes a la Policía Nacional la desaparición de siete armas que estaban dentro de un armario y supuestamente cerrado bajo llave.
Dijo que la última vez que verificaron las armas fue el 7 de junio pasado y este jueves se percató de que faltaban siete revólveres calibre 38 milímetros.
El comisario Celso Zelaya, manifestó que agentes fueron hasta la empresa para interiorizarse de la situación y hacer el estudio de campo correspondiente.
Comentó que el edificio donde está la empresa cuenta con varias cámaras de circuito cerrado y que «es un lugar bien seguro». Aclaró que no se vio violentada la puerta de acceso y que están tratando de recabar más datos.
«El edificio cuenta con varias cámaras de seguridad, está bien custodiado, tiene un portero en el acceso al edificio, en todos los pasillos cuentan con cámaras de circuito cerrado que va a ayudar mucho para tratar de esclarecer», agregó.