La época de altas temperaturas y humedad incrementa la movilidad de alacranes y escorpiones, elevando el riesgo de picaduras en niños y mascotas. Expertos alertan que el alacrán rubio puede causar complicaciones graves e incluso mortalidad, mientras que el escorpión negro provoca dolor intenso, pero no genera riesgo de muerte.
Se recomienda extremar precauciones domésticas: revisar camas, cunas y zapatos, y evitar que sábanas toquen el piso. Colocar burletes en puertas y separar muebles de las paredes reduce la posibilidad de contacto con los arácnidos. Los especialistas destacan la utilidad de linternas de luz ultravioleta, que hacen visibles a los alacranes durante la noche por su fluorescencia.
El 98% de las picaduras en adultos solo producen dolor, pero en niños el riesgo de complicaciones aumenta considerablemente. Las mascotas, especialmente perros, también pueden sufrir graves efectos al entrar en contacto con estos animales.
Especialistas afirman que Paraguay cuenta con antiveneno para humanos, pero no existen tratamientos específicos para animales. En caso de picadura, el protocolo médico exige observación de 6 horas en hospital para monitorear síntomas como taquicardia o salivación excesiva. Las autoridades insisten en que la prevención física en hogares es la medida más eficaz para evitar incidentes durante el verano.