La Policía detuvo a una trabajadora doméstica y a la pareja de la misma, sospechada de sustraer G. 53 millones de la casa de una modelo.
Tras un careo entre las partes, la denunciada confesó el hecho y aseguró que utilizó el dinero para comprar un automóvil, según el reporte policial.
Luego de la confesión, la Policía terminó incautando el supuesto auto comprado con el dinero robado.