“Lo único que se puede hacer ahora es esperar que los supuestos secuestradores se comuniquen con la familia. Asegurarán a las víctimas y luego enviarán el mensaje”, dijo Hans Lindstrom, sobrino del ganadero Luis Lindstrom, secuestrado en el 2008, aconsejando a las familias de los desaparecidos.
Hans participó del pago de rescate para su tío, recordando que fue un 8 de septiembre, abonando USD 400.000 y luego de 40 días el ganadero fue liberado.
Lindstrom se solidarizó con los familiares de las víctimas y aseguró que el hecho abre una herida muy importante en los que pasaron por la misma situación.