Los dos delincuentes armados se movilizaban a bordo de una motocicleta e interceptaron a su víctima que acababa de retirar dinero en efectivo correspondiente al cobro de un préstamo. Los delincuentes se acercaron con una mochila y la intimidaron con armas de fuego, lograron arrebatarle el dinero en efectivo, documentos y dos celulares. Se presume que la información sobre la transacción pudo haber sido filtrada, según la Policía.
Inmediatamente después del asalto, la víctima comunicó lo sucedido a la policía. Las autoridades iniciaron rápidamente un operativo de rastreo utilizando el sistema GPS de los celulares robados, la señal fue ubicada en una zona boscosa, en los límites jurisdiccionales con otras comisarías, lo que permitió a los agentes recuperar dos teléfonos celulares que habían sido abandonados por los supuestos autores. A pesar de esto, informaron que el dinero en efectivo no pudo ser recuperado, y los responsables del asalto aún no han sido localizados.
Las imágenes obtenidas de los delincuentes es el principal elemento con el que cuenta la policía para continuar con la investigación y seguirles el rastro.