Mientras autoridades del mundo entero instan a acatar las medidas sanitarias ante el avance del coronavirus. Bolsanaro realiza un claro llamamiento para protestar contra la cuarentena sanitaria y participa en un acto favorable a una intervención militar en un intento de cohesionar a su base.
“Nosotros no queremos negociar nada. Queremos acción por Brasil”, dice el mandatario desde una camioneta a la multitud reunida frente a la sede del Ejército cuando Brasil suma 38.654 casos de coronavirus y 2.462 muertes confirmadas. El eufórico mandatario tosía frente a la gran aglomeración de personas.
Acto que fue repudiado por el presidente de la Cámara de los Diputados, jueces del Tribunal Supremo y dos tercios de los gobernadores.
El inminente avance del covid-19, posiciona al presidente del Brasil políticamente aislado frente al amplio consenso alcanzado por prácticamente todos los gobernadores, que aunque son de distintos signos políticos implantaron cuarentenas en sus respectivos Estados y las mantienen pese a la presión.