En la noche del lunes, unos 80 reclusos del Departamento de Judiciales de la Policía Nacional se amotinaron, ocasionando un principio de incendio, aparentemente en protesta a el traslado de reclusos y el temor al coronavirus.
Dos reos quedaron con heridas de balines de goma, mientras que uno se intoxicó con la humareda por la quema de colchones y prenda de vestir.