La Municipalidad de Caapucú emitió una resolución que prohíbe terminantemente toda actividad o evento alusivo a Halloween, tanto públicos como privados, dentro de su jurisdicción.
La medida, firmada por el intendente Gustavo Penayo Arce y el secretario general Alan Zaracho, fue adoptada a pocos días de la tradicional fecha del 31 de octubre. El documento sostiene que la festividad representa “costumbres contrarias a la formación moral, religiosa y a la identidad cristiana” del distrito.
Además, se ampara en la autonomía política municipal establecida en el artículo 166 de la Constitución Nacional. La resolución prohíbe celebraciones incluso en escuelas y colegios, aun con fines de recaudación, y extiende la medida a fiestas privadas.
Argumenta que Halloween introduce “símbolos de oscuridad, muerte y superstición” que afectan la formación de niños y jóvenes. Asimismo, la municipalidad insta a promover actividades alternativas que fortalezcan los valores de la fe, la vida y la solidaridad cristiana.
La decisión generó un amplio debate público, ya que críticos la califican de “imposición religiosa” y recuerdan que Paraguay es un Estado laico que garantiza la libertad de culto. Algunos advierten que la prohibición podría resultar contraproducente, despertando mayor curiosidad entre los jóvenes.