En contacto con este medio, el comisario Carlos Duré, jefe de Interpol, explicó que la detención de los cinco sospechosos es parte del operativo «Añua», que investiga la comercialización de materiales pornográficos infantiles.
Señaló que detectaron a un supuesto distribuidor que cobraba por los materiales prohibidos y siguiendo la investigación llegaron a los consumidores.
«Se está construyendo una serie de equipos de trabajo para la puesta en funcionamiento de un laboratorio de investigación de hechos que atentan contra mujeres y niños», dijo afirmando que es el inicio de varios procedimientos contra este grave delito.