El incidente ocurrió en horas de la madrugada del jueves en el barrio Ricardo Brugada, sumándose a una serie de hechos de inseguridad reportados recientemente en la zona. Las imágenes captadas muestran el momento en que un hombre se aproxima tranquilamente al lugar. Llama la atención que este individuo saludó a otras personas que estaban sentadas allí, antes de dirigirse hacia la víctima, y empezar a disparar “a quemarropa”. La víctima y otra mujer que la acompañaba entraron “despavoridas” a la casa para intentar refugiarse.
Según la policía y los vecinos, lo que impidió la consumación del asesinato fue el fallo mecánico del arma. El delincuente tenía a la víctima, “en la mira” cuando la máquina se trabó. Gracias a este desperfecto, que permitió a la mujer salvarse “de milagro” el sicario se vio obligado a huir del lugar. Presumen que los autores del atentado conocen bien la zona, e incluso que podrían ser conocidos por los vecinos, ya que se les permitió el paso tranquilamente.
Hasta el momento, no se tienen detalles sobre el objetivo ni la mecánica detrás del intento de asesinato, y la policía continúa investigando por qué la querían matar y a qué se dedica la víctima.