Desde tempranas horas de la mañana de este miércoles, ocho allanamientos se ejecutan en el departamento de Canindeyú, como parte del “Operativo Barret”, que busca a los integrantes de la estructura criminal de alias “Macho”.
Durante las intervenciones, se allanó una lujosa vivienda que, según las investigaciones, pertenece a Nilson David Maylin Haedo, identificado como el “gerente” del narcotraficante.
Además, el operativo alcanzó dos entes públicos, una comisaría de la Policía Nacional y un destacamento militar, resultando en la detención de dos efectivos militares y un agente de la Policía Nacional. Estos uniformados serían los responsables de facilitar el transporte de marihuana, de vender armas y municiones del Estado a la banda criminal, las cuales fueron utilizadas en enfrentamientos contra la Fuerza de Tarea Conjunta, dejando heridos a militares de alto grado.
El comisario Luis López, jefe del Departamento contra el crimen organizado, precisó que Maylin Haedo se dedicaba exclusivamente al cultivo y tráfico de drogas, asumiendo el “trabajo pesado”. Sus funciones también incluían el reclutamiento de personas, desde pobladores locales hasta indígenas, para las tareas de cultivo, acopio y ordenamiento de la marihuana que luego sería comercializada, principalmente en Brasil, a través de los ríos. Más alarmante aún, las investigaciones fiscales revelan que el “gerente” se encargaba de colaborar con los miembros de las fuerzas públicas a través de pagos a policías y militares, tanto en Canindeyú como en San Pedro.
El fiscal Cristian Ortiz, de la Unidad Especializada de Lucha contra el Crimen Organizado y Narcotráfico, encabeza este operativo, buscando desmantelar por completo el “primer anillo” de esta poderosa red.