La incautación de la camioneta se produjo durante un control aleatorio. Al ser verificada, se constató que la chapa, el chasis y la cédula verde eran apócrifos. La persona que conducía el vehículo presentó documentos que, según él, acreditaban una compra legal, pero quedó vinculada a un proceso investigativo.
Lo sorprendente del caso es que la camioneta era idéntica a la que pertenece a un coronel retirado paraguayo, quien se enteró de la situación al descubrir que existía un vehículo con la misma matrícula. La investigación preliminar sugiere que una estructura criminal con acceso a información privilegiada logró falsificar los documentos de la camioneta idéntica que ya existía legalmente en Paraguay. Esto implicó la clonación de la chapa, el número de chasis y la elaboración de una cédula verde apócrifa.
El Comisario Juan Pereira explicó que si el vehículo incautado llegara a estar involucrado en algún hecho punible, un accidente o una situación más grave, la responsabilidad legal recaería inicialmente sobre el titular de la camioneta original, aunque esta no estuviera en circulación.