El escalofriante descubrimiento se produjo este lunes alrededor de las 11:00 de la mañana, cuando su nieto de 9 años acudió a buscarlo para el desayuno, como de costumbre, y lo encontró sin vida y ensangrentado en su habitación.
Los investigadores de la Comisaría Séptima de Nanawa, en conjunto con personal de Homicidios y el Ministerio Público, informaron que el cuerpo presentaba heridas cortantes profundas, posiblemente ocasionadas con un machete o algún arma blanca similar, que le desfiguraron el rostro y le cortaron una mano. Un detalle clave es que no faltaba ninguna pertenencia de valor en la casa, descartando así el robo como el móvil principal del crimen.
La forma atroz en que fue ultimado Santiago González (75), sin signos de resistencia y con tal nivel de saña, lleva a los investigadores a manejar como hipótesis principal la de un ajuste de cuentas. Se sabe que la víctima contaba con dos órdenes de captura pendientes: una por venta y comercialización de estupefacientes y otra por un caso de abigeato ocurrido años atrás.
La policía continúa con un trabajo investigativo minucioso y se espera tener novedades en las próximas horas, aunque la hipótesis de un problema relacionado con la venta de drogas cobra fuerza debido a los antecedentes del fallecido y la particular brutalidad del crimen.