El programa “Hambre Cero”, impulsado por el gobierno de Santiago Peña, atraviesa una seria crisis financiera por la falta de pago a las empresas proveedoras del almuerzo y la merienda escolar. La deuda solo este año, estimada en USD 150 millones, se arrastra desde hace unos 150 días, además existen deudas de años anteriores, según confirmó Víctor Mendoza, titular de la Cámara de Alimentación Escolar del Paraguay.
Víctor Mendoza señaló que el monto equivale a casi la mitad del costo anual del plan, que requiere unos USD 300 millones. La mora ha provocado un impacto insostenible en la cadena de pagos a trabajadores, afectando a unas 30.000 personas de forma directa y a 150.000 de manera indirecta. Los proveedores enfrentan además un aumento del 30% en los precios de alimentos y del 5% en salarios.
Aunque las empresas mantendrán el servicio hasta fin de clases, advirtieron que no podrán iniciar el año lectivo 2026 si no se cancelan las deudas pendientes. El sector pidió un auxilio urgente al Ministerio de Economía y Finanzas para que el gobierno salde los compromisos antes de febrero.