La víctima intentó resistirse al atraco, pero no pudo evitar que los asaltantes le robaran sus pertenencias. Los malvivientes se llevaron su celular, la tablet de su hijo y documentos, aunque, afortunadamente, no lograron sustraer dinero en efectivo. Tras cometer el robo, el asaltante se alejó rápidamente y regresó al automóvil donde lo esperaban sus cómplices, para huir del lugar. El vehículo había quedado estacionado a metros del sitio del asalto.
Testigos presenciales se dieron cuenta de lo ocurrido, pero no pudieron hacer nada para alcanzar a los delincuentes. La mujer, tras el episodio, quedó en estado de shock. Vecinos de la zona relataron a la policía que la inseguridad es un problema recurrente, mencionando que ya se han registrado al menos tres incidentes similares en el área, incluyendo un robo en un restaurante cercano.
Se especula que los delincuentes aprovechan horarios en los que la policía no realiza sus recorridos habituales, a pesar de que los agentes de la comisaría y las patrulleras Lince suelen hacer rastrillajes en la zona.