En una entrevista con Iván Ojeda, director del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), se abordó el preocupante aumento de la informalidad laboral en el país, revelado por los últimos datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Según la encuesta, en el segundo trimestre de 2025, más de 70.000 personas se sumaron al sector informal en comparación con el mismo período del año anterior.
“El comercio ha sido el principal motor de este crecimiento, con 97.000 nuevos ocupados, mientras que la industria aportó 23.000 nuevos puestos de trabajo”, explicó Ojeda. A pesar de este crecimiento, la informalidad sigue siendo un desafío crucial, ya que más de 1.550.000 personas actualmente trabajan sin contar con RUC (en el caso de los trabajadores independientes) ni IPS (en el caso de los dependientes), frente a apenas 900.000 personas en el ámbito formal.
Este aumento plantea interrogantes sobre las políticas laborales y la efectividad de los sistemas de seguridad social, ya que el número creciente de trabajadores informales dificulta su acceso a beneficios como la jubilación, la salud y otros derechos laborales fundamentales.
Ojeda también reflexionó sobre las posibles causas de este fenómeno y destacó que, aunque el crecimiento del comercio y la industria ha generado más ocupación, muchas de estas nuevas posiciones aún no logran formalizarse. Esto podría estar relacionado con factores como la flexibilización laboral y la falta de incentivos para la inscripción en el sistema formal.
Este panorama refleja una realidad compleja para el mercado laboral, que requiere medidas urgentes para reducir la informalidad y garantizar mejores condiciones para los trabajadores en el futuro.