El narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, buscado internacionalmente por su participación en redes criminales en América Latina, fue acusado formalmente por el Departamento de Justicia de Estados Unidos por lavado de dinero, de acuerdo a las investigaciones estaría en Venezuela.
De acuerdo con la imputación, Marset habría utilizado el sistema financiero de EE. UU. para ocultar y legitimar ganancias ilícitas generadas por actividades criminales a gran escala. En respuesta, el Departamento de Estado norteamericano activó su Programa de Recompensas contra el Crimen Organizado Transnacional, una iniciativa que ofrece incentivos económicos a quienes aporten información clave para la captura de figuras del crimen organizado.
Este programa busca desmantelar redes criminales de alcance internacional, y la inclusión de Marset representa un nuevo esfuerzo por frenar sus operaciones, que se extienden por varios países de América Latina. El uruguayo ya era buscado por su rol dentro de organizaciones dedicadas al tráfico de drogas y su presunta responsabilidad en la coordinación de actividades ilegales desde el extranjero.